Con el fin de garantizar el debido proceso se establecen ciertas prohibiciones para los miembros del jurado:

› No se permite conversar con los miembros del jurado sobre el caso o las personas involucradas en el mismo hasta el momento de la deliberación.
› Se prohíbe comentar el caso a miembros de su familia, amistades, compañeros de trabajo o a través de redes sociales.
› No permitir a nadie le haga comentarios sobre el caso y avisar de inmediato al Tribunal si alguien lo intentara.
› No informarse a través de la prensa sobre el caso, ya que debe resolver exclusivamente en base a la prueba que se produce durante el debate.
› No buscar información ni realizar una propia investigación sobre los asuntos relacionados con el caso.
› No utilizar su teléfono celular durante las audiencias.
› No podrán sacar conclusiones acerca del veredicto hasta tanto se haya presentado toda la prueba.
› No podrán conocer las constancias de la investigación penal preparatoria. Solo tendrán acceso a la prueba producida o incorporada durante la audiencia de debate.
› No podrán interrogar al imputado, ni a los testigos o peritos.